Dejar atrás

Qué duro es soltar, ¿no?

Nos aferramos a todo, a personas, cosas, conductas... nos resistimos a los cambios, tenemos miedo de que lo que pueda venir por delante, al ser desconocido, sea peor.

Pero, ¿y si no lo es?

Yo personalmente soy una persona que suelo vivir con miedo al cambio, me gusta sentirme segura y muchas veces he preferido estar un poco mal antes que hacer algun cambio por miedo a lo desconocido, pero te aseguro que las veces que me he lanzado, he salido de mi zona de confort y he hecho algún cambio en mi vida (con el miedo siempre conmigo, eso no se va) me ha llevado a cosas increíbles y maravillosas.

Está claro que no siempre es fácil, no siempre vas a obtener recompensas a corto plazo, y tampoco es necesario que estés cambiando cosas cada poco tiempo, lo que es necesario es que sueltes todo aquello que ya no te aporta nada.

Si algún comportamiento, forma de hacer las cosas, trabajo, persona... ya no te aporta, ¡Suéltalo! Ya no te hace feliz, por lo tanto ya no funciona como solía hacerlo... si por lo que sea, era para ti, volverá, eso te lo aseguro.

Tampoco es cuestión de que te enfoques en el futuro, ya que es incierto; pero mucho menos hay que vivir en el pasado.

La depresión es exceso de PASADO, la ansiedad es exceso de FUTURO, y la PAZ es vivir en el PRESENTE.

Sabes lo que te voy a decir ahora, ¿no?

SIEMPRE ES AHORA

¿Sabes ya lo que necesitas soltar?